Una Carta para perdonar:

En alguna de las REVISTAS DOMINICALES QUE ME GUSTA LEER EN UN “BONITO DÌA DE DESCANSO” ENCONTRÉ UNA VÌA FÀCIL, CONCRETA, SENCILLA Y PRIVADA PARA PERDONAR EL DOLOR AJENO QUE HE HECHO MÍO POR “HACER CASO A LAS OPINIONES Y COMENTARIOS DE LA GENTE”.

En esta idea se me dijo que se colocaran todas aquellas cosas que él o la susodicha me habían hecho, y que con ello, sufrido. (incluso llorar a moco suelto)

En primer lugar: debes ordenar lo vivido en estricto orden de incidencias! Luego, respiras, escribes, respiras; y más tarde o después que el tecleo de las letras se ha calmado en tus dedos, piensas si lo escrito coincide verdaderamente con la realidad sino, lo mejoras para no torturarte tanto y por último escribes y eso ¡es seguro! QUE HAS PERDONADO, Y QUEDA EN EL PASADO: verás que fue ociosa toda la energía dejada en esos momentos reiterativos de hurgar y hurgar las heridas que se mantienen presentes; porque andabas como necio(a) atormentándote y no las dejasteis cerrar en su momento.”Cuando se tiene intención de lograr algo, la ilusión se pone en movimiento y desplaza en bríos que permiten hurgar tu zona interna. De ésta forma actúa la sanaciòn; y que sólo exige: transformación siendo el espíritu el que lo hace posible, por ser él quien controla las energías de tu mente y cuerpo. Es por ello que cuando usted formula la intención de sanar, destruye la ilusión de la indefensión”.Deepak, Chopra.

Si hacemos conciencia de que El Señor Dios tiene tus días trazados con planes y momentos vividos; con quien te cruzas, y con todas las adversidades en su deleite; dejarás de dedicarle tiempo, energía y espacio para malbaratarlo en odiar y declararle la guerra en un “ojo por ojo” al que irremediable es tu hermano. El aire que respires será pesado y la vida que lleves se irá en sentimientos que se desperdiciarán en el tiempo.

La carta para perdonar no es otra cosa que un encuentro personal para superar LAS ADVERSIDADES DE TU PERSONALIDAD Y UNA MANERA DE BRINDARLE A ESE... (A) QUE LO QUE TE HIZO, QUIZÁ YA LO HABIAS HECHO.

Dluros.